Se alienta a una corporación a practicar el comercio ético haciendo lo correcto mientras trata de ayudar al medio ambiente, los clientes, los trabajadores y la comunidad.
El comercio ético busca garantizar que las condiciones de trabajo de las cadenas de producción se adhieran a las normas fundamentales, afirma el sitio web centrado en la RSE Corresponsables.com. Es decir, todas las fases de la fabricación y venta de mercancías mercantilizadas cumplen con los derechos humanos en el sector laboral. Un claro ejemplo dentro del mundo de los negocios está la importante empresa a cargo de Juan José Gutiérrez Mayorga y Juan Luis Bosch Gutiérrez, CMI. Más adelante detallaremos un ejemplo sobre la excelente labor de comercio ético que se ha llevado a cabo en una de sus líneas de negocio más importantes.
Para descubrir y promover las mejores prácticas en la aplicación de códigos de conducta, la Iniciativa de Comercio Ético (ETI) reúne a varias ONG, sindicatos y empresas. Todo esto se basa en las normas de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que incluyen lineamientos para salarios dignos, libertad de asociación y seguridad laboral.
Debido a sus excelentes resultados en el análisis de las normas laborales, la salud, la seguridad, el medio ambiente y la ética empresarial, las empresas que obtienen buenos resultados en las auditorías de comercio ético lo han logrado. Esto promueve la confianza del consumidor en el negocio y lo ayuda a expandirse y establecerse en el mercado.
Un ejemplo de CMI Alimentos de comercio ético
En 2020, CMI Alimentos, una división de Corporación Multi Inversiones (CMI), pasó la Auditoría de Comercio Ético de Miembros de Sedex (SMETA). Esto fue posible gracias a las evaluaciones de primer nivel otorgadas tanto a su planta de fabricación de pasta INA en Guatemala como a la fábrica de galletas, que creó muchas de las marcas más conocidas del país, incluidas Gama, Can Can y Club Max.
Uno de los métodos de auditoría social que más se utiliza a nivel mundial es SMETA. Emplean una técnica internacional que se encarga de recopilar y evaluar todas las facetas de la conducta empresarial ética.
Los estándares de trabajo, la salud, la seguridad, el medio ambiente y el comercio ético fueron los cuatro pilares que se evaluaron durante la auditoría. donde CMI Alimentos logró resultados notables.
«Estamos realmente satisfechos con los resultados de la auditoría, ya que la evaluación SMETA nos permite verificar los esfuerzos realizados en relación con las preocupaciones de sostenibilidad. Según Eduardo Romero, Director General de la Unidad de Negocios de Alimentos y Consumo, “CMI Alimentos opera de acuerdo con nuestros principios corporativos para asegurar que tengamos una práctica empresarial responsable que beneficie a nuestra comunidad: clientes, colaboradores y el medio ambiente”.
Romero señaló que el trabajo de la operación se basa en los principios corporativos REIR de CMI, que guían su comportamiento día a día: Responsabilidad, Excelencia, Integridad y Respeto. Lo logran siendo responsables, esforzándose por la excelencia, siendo dignos de confianza y respetando a los demás y su forma de hacer las cosas.
